lunes, 7 de noviembre de 2011

La verdad sobre perras y mujeres



Aunque no lo parezca y es que tampoco me apetece, no os traigo un postecito de cine, sino un poquito de mí.

Además de quemar falsos mitos, por no llamarlos gilipolleces, ahora veréis que quiero decir,

Estábamos una tarde, mi amiga Maria y yo en su casa recordando en la de pequeños líos y grandes experiencias que nos hemos visto envueltas juntas, porque salir con mis amigas ya no sólo con Maria, sino también con las demás, supone una aventura, porque no hemos sido nunca precisamente mujeres con la entidad y energía de un potus de plástico.
Digamos que cuando llegamos, se nota, se ve, se siente… me ha quedado a cántico político o de fútbol (que es casi lo mismo), pero es así.

Que vamos al supermercado, yo casi me caigo dentro de las neveras de congelados escogiendo una pizza para la cena, que nos cogemos el ave destino Madrid, pues en Zaragoza Delicias ya se ha enterado el maquinista que está 7 vagones por delante que allí estamos, y vamos de viaje, con maletas, potingues, tacones, cámaras de video y blackberrys.
Somos así, quedamos tan bien en el Mandarin Hotel tomando un Dry martini, y viendo zapatos Manolo, como de romería, en el rastro de Madrid, de barbacoa y reivindicando el 15-O.

Y aquí están ellas, Carrie y sus amigas, las que tienen una serie donde pasear palmito, con más temporadas que los pasajes de la Biblia y casi, casi igual de interesantes.
Que no trabajan (o al menos no duramente) porque Samantha la rubia de hormonas alteradas, es publicista y vive como una reina, porque yo que soy de su gremio, me voy controlando las ulceras, de los nervios que paso, todo para ayer, todo para ayer, y a ella la veo yo muy suelta, en cuanto a trabajo me refiero, que en vida personal yo no me meto.

Que se pasan la vida comiendo juntas, al gym, de shopping, de peluquería, haciéndose las uñas, de cóctel nocturno, fiesta, presentación, despedidas de algo o alguien….yo no sé vosotr@s pero es a mí no es que no me cuadre el horario como para tener tiempo libre para trabajar, sino para respirar! no hablemos ya de tener encima pareja, hijos…

En esto me dice mi amiga, nena escribe tú un libro…y cuenta la verdad de una vez por todas…y hombre a libro no llegamos pero aquí un poco de realidad si os voy a contar, y si alguien se deprime asomándose al mundo, que no siga leyendo.

Yo es que me levanto temprano, como tod@s no?
Desayuno, fruta, y café muuuucho, café, Hacendado mezcla que es el que me gusta, y eso que tengo Nespresso….sólo y sin leche, #lactosaasesina. Ducha para acabar de despertarme, me visto, no me peino y salgo con la bolsa del tupper (léase taper), mi bolso XXL, las llaves del coche, el neceser y la blackberry en la mano, me maquillo en el coche, depende de la caravana o en la mesa de mi oficina, ese lugar al que intento no llegar nunca tarde, y que parece que cada día esta más lejos y encima es imposible aparcar, digo yo, en la era del todo para bolso, maquillaje para bolso, agenda para bolso, bolígrafos para bolso….para cuando un coche para bolso????
El teléfono ya suena antes de que siente el culo en mi silla, si es que antes no me han llamado al manos libres del coche, y me descargo una media de 150 correos.

No quedo nunca a comer con mis amigas, más que nada porque tengo 45’ para comer y trabajo más de 9 horas diarias, y a ellas las tengo trabajando y viviendo a media hora en coche, además que ya tienen bastante con lo suyo y yo con lo mío, como para tener conversaciones tipo Sex and the City mientras engullimos ensaladas de tomate y pollo a la plancha, que si la serie fuera española, hablarían de Belén, de Jorge Javier y de Gran Hermano y no estarían de cañitas por la Latina de Madrid, ni comiendo en Bestial del puerto de Barcelona, porque son más cursis y marujas que las señoras modernas de hoy en día que viven en mi barrio, que esas sí que me molan, que las de Carrie van de devora hombres, y están pidiendo flores y vestidos blancos a grito en cuello como diría mi hermano, nada en contra entiéndanme, pero no me vengan de señoras modernas que usan y tiran hombres al primer contenedor que se encuentran si es de chanel, porque no cuela a estas alturas del milenio.

Estoy todo el día, entra que te sale, visitando a mis clientes, todo para ayer, todo para ayer…y diciendo sí claro que sí, por supuesto, claro que sí….
Aaaaahhhh!!! Tanto que llego a mi casa y me niego a todo…yo sola como para darme el gusto de negarme a algo.

Mi casa….oh…ese lugar que echo tanto de menos, al que entro por la tarde, me tomo un té y algo para masticar con poco gusto, mientras recojo los trastos a mi paso, pongo una lavadora con la mano izquierda, doblo la ropa de la secadora con la derecha, y enciendo el ordenador con la punta del pie, porque me quedan por delante horas de estudio, envuelta en apuntes de marqueting, y una mala leche (ya he dicho que la lactosa no me sienta bien) que no te la salta un torero.
Intento tener algún ratito para salir a andar, o correr o ir a la piscina. (ja, ja y ja!)
Al rato, la lavadora se para, y enciendo la secadora, la vaporera para cocinar verduras (con mucho vapor y poco sabor) y el lavavajillas, y me salta el diferencial de la luz, apago uno de mis trastos, y pienso cómo echo de menos fumar, porque ahora me bajaba a la calle y me fumaba un caliqueño de esos que duran horas encendidos, y no vuelvo a subir a mi piso hasta que le vea el fin o me duelan los bronquios.

Quítate los potingues de la cara, ponte cremas, pijama y …relax? No, nunca…porque a los vecinos les da por tener juega gitana los lunes, miércoles, y domingos y los martes, jueves también…qué porque me pongo tapones, qué porque duermo con antifaz y porque abuso de las dormidinas…pues eso digo yo…
Y entonces así me levanto un lunes de agosto y pienso en quedar con mis amigas, y el viernes siguiente que me paro a pensar, es Navidad y viene mi familia a cenar a casa porque es Nochebuena, y mis amigas… cuanto hace que no las veo en persona?
Suerte del facebook, y sus fotos de perfil que veo si han cambiado de aspecto o siguen con vida, si han cambiado el estado de solteras a casadas, y si en su sexo aun sigue poniendo mujer, menos mal que hablamos por la BB y el móvil, cuando nos funciona…y que sigo su perfil de twitter, que sino….
Aun así hemos aprendido a querernos muchísimo, a compartirlo todo, y cuando nos echamos mucho, mucho de menos, tachamos las citas de la agenda, cogemos la BB, y nos vamos a la peluquería a peinarnos, a hacernos las uñas, mientras nos tomamos un café, nos ponemos al día e informamos a la peluquera que está con la GHD y la antena puesta porque sabe hacer como nosotras 30 cosas a la vez,
Mandamos mensajes, mails y hablamos por teléfono, pendientes de nuestra amiga y de lo que pasa al otro lado del teléfono, sean maridos, hijos familia o trabajo, mientras nos echan el tinte y nos matan las cutículas, (que no son ningún tipo de parásito).
Y nos vamos a casa felices de haber pasado toda una tarde dedicada exclusivamente a estar por fin a solas con nuestras amigas. ;)

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